En casa de…
Hoy nos vamos a “acercar “ a las casas de tres familias del club. Hemos estado a lo largo de la semana en contacto virtual con todos ellos para que nos contaran cómo es su día a día del #quedatencasa.
Aunque muchos ya los conocéis, os presentamos a: Esteban, Manoli (directiva del área económica del club), Jordi (jugador del infantil A), Anna (jugadora del alevín fucsia B), Rubén, Mª Ángeles (delegada del infantil A femenino), Nerea (jugadora del infantil A ), Lidia (jugadora del alevín fucsia A), Vicente (delegado del juvenil A masculino), Estíbaliz, Álex (jugador del juvenil A) y Marcos (jugador del cadete A). Esteban, Rubén y Estíbaliz forman parte de la gran afición de nuestro club y como bien dice Rubén, yendo de aquí para allá con el coche a donde haga falta.
Nos cuentan como compaginan el trabajo de los padres y los estudios.
En el caso de Manoli y Esteban, ambos informáticos, trabajan desde casa aunque han tenido que “remodelar” el comedor para generar su área de trabajo. Jordi, alumno de 1º ESO estudia en su habitación y Anna (5º de primaria) en la cocina. Se han tenido que adaptar a los espacios pero se han organizado muy bien. Tanto Jordi como Anna nos cuentan que se levantan sobre las 8, y tras la ducha y el desayuno, arreglan la habitación y realizan los deberes hasta la hora de comer. A veces siguen por la tarde, otras no. Algunas tardes tienen inglés, solfeo y percusión on line también.
Mª Ángeles trabaja en un laboratorio medioambiental analizando, entre muchas otras cosas, el agua que se distribuye por la red de diversas poblaciones. Combina el trabajo online con el presencial puesto que es un servicio considerado “esencial”. Rubén es técnico de laboratorio también, trabaja por las mañanas. Nerea estudia 2º ESO y se conecta al classroom todas las mañanas, con el horario habitual que tendría, hace las tareas y nos cuenta que ya ha hecho un par de exámenes on line. Lidia, 6º de primaria, también se conecta a la plataforma y hace los deberes (envía fotos o vídeo al tutor).
Vicente nos cuenta que de momento se van apañando bien. Alex y Marcos se meten en sus habitaciones y se pasan las mañanas (y algunas tardes) liados con sus clases online. Álex tiene prácticamente el mismo horario (de 8 a 14hs.) y continúa terminando temario, ya que le ha pillado en un curso complicado como es 2º de Bachiller. Marcos (3ºESO) sí que ha reducido horario (de 9 a 13hs). Estíbaliz sigue con sus faenas domésticas y su estudio. Vicente teletrabaja y algún día se acerca a la oficina o las obras.
Sobre si se cuidan más, nos comentan que:
Las tres familias coinciden que con respecto a la alimentación, más o menos como antes. Pero que a veces se dan “algún caprichito” especialmente en los momentos de ocio.
Las tres familias cuidan el estado físico. En casa de Manoli, a las 19:00 hacen los 4 una hora aprox de ejercicio. Aprovechando que Ana Abellán le envía a Nerea (y a todo el equipo) todos los días ejercicios, se apuntan también María Ángeles y Lidia y se ponen las tres por las tardes. Rubén hay veces que se une a “las chicas” o hace su propia tabla de ejercicios. Álex y Marcos nos comentan: “todos los días hacemos las rutinas que nos han mandado nuestros entrenadores”. Estíbaliz, tres o cuatro días a la semana, se pone en marcha con los vídeos de pilates de Amparo (¡un saludo!) y Vicente, menos constante, hace algo de actividad…”lo suficiente para no quedarme anquilosado”.
Todos siguen con sus rutinas de higiene, aunque se laven más a menudo las manos. Nos cuentan que extreman las precauciones especialmente cuando van a la compra.
Les preguntamos sobre cómo se organizan en las tareas domésticas y todos nos dicen que en mayor o menos medida colaboran. Los hijos/as deben mantener sus habitaciones en orden y después participan también en las tareas “comunes”. Depende de horarios y días, más dedicación a la limpieza el fin de semana. Mª Ángeles nos cuenta que planifica las tareas de sus hijas y después hacen repaso diario sobre si se ha cumplido o no.
Respecto a si han aprovechado el confinamiento para hacer alguna actividad o tarea que antes por falta de tiempo no hubieran podido realizar, la diversidad es amplia: desde hacer limpiezas más “a fondo”, a los “apaños” caseros de Rubén, a montar un puzle de 2000 piezas, investigar nuevas recetas en la cocina (pan, dulces), jugar al escape room…
Les hemos pedido que nos comentaran como llevan anímicamente el confinamiento.
En general, las tres familias lo llevan bastante bien. Dedican mucho tiempo a las tareas diarias y así que no tienen tiempo para aburrirse. Y comparten momentos de ocio familiar especialmente los fines de semana.
Mª Ángeles nos traslada una reflexión muy interesante:
“Pues la verdad es que ir a trabajar nunca pensé que llegaría a resultar tan reconfortante. Jamás se me había pasado por la cabeza que un país entero podía llegar a estar confinado en casa durante semanas. Es más típico de novelas de ciencia ficción y cosas así. De ahí que el poder salir de casa, coger el coche y plantarte en otro sitio que no sean las paredes de tu casa, hablar y sociabilizarte con más personas que no sean los miembros de tu familia, te hacen sentir que eres útil, te hacen volver aparentemente a tu estado de rutina habitual y en tu mente creas una situación de normalidad. Así que, me siento afortunada, y no lo llevo nada mal.”
Y por último les hemos pedido que nos cuenten como viven el estar alejados de las pistas de balonmano.
Álex echa de menos los entrenamientos, los compañeros de equipo, los partidos, las broncas de Patxi y sus brutales crónicas… Marcos nos comenta sensaciones similares. Anna echa de menos a sus amigas y a Nando. Jordi, al igual que los demás, sueña con volver a entrenar y a jugar con sus compañeros de equipo. Nerea nos cuenta que le apetecería poder ir a entrenar, ensayar jugadas con mis compañeras de equipo, jugar partidos… Que tienen un grupo de whatsapp y de vez en cuando hacen videollamadas, así que puede verles las caras a mis amigas, a mi entrenadora y pasar tiempo con ellas. Lidia quiere pronto volver a correr tras el balón y manda recuerdos a Ximo y a sus compañeras.
Los papis… Manoli nos cuenta que tenemos “mucho mono” de…. POLI. Estamos deseando volver a la “charraeta” mientras ellos entrenan, a dejarnos la garganta animando en los partidos… Mantenemos un poco el contacto con los equipos por whatsapp incluso alguna “video” con algunos amigos, pero no es lo mismo…. nos apetece ya el contacto humano y vernos las caras. Estíbaliz añade que: “Son ya unos cuantos años siguiendo los entrenamientos, los partidos, viajando, compartiendo los almuerzos (parte muy importante) con el resto de padres… La verdad es que hemos tenido la gran suerte de coincidir con estupendas personas y grandes hinchas en los equipos de nuestros hijos. Hemos compartido muchas cosas con ellos/as y eso es algo que siempre recordaremos con especial cariño. Nuestra agenda de fin de semana la ocupaba en gran medida el balonmano…qué te voy a contar a tí, Alicia. Si un fin de semana sin balonmano se nos hacía raro, no os quiero contar un mes que llevamos ya.” Y finalmente, Rubén comenta que echa de menos los partidos del fin de semana y María Ángeles nos dice que “antes de todo esto sí que es verdad que tenía la sensación que no desconectaba del balonmano. Que por una cosa u otra siempre estaba liada con mensajes de whatsapp de los diferentes grupos que tengo relacionados con el club, casi todos los días me pasaba por el poli, entrenes, partidos crónicas… Y ahora, silencio. Todo eso ya no está. Ya no tengo la satisfacción de ver entrenar a mis hijas, de verlas interactuar con su equipo, ya no tengo el gusanillo previo a cada partido, los nervios…ya no tengo que acordarme de tener la crónica hecha el domingo por la mañana… Y todo eso se echa de menos”.
Todos nos envían multitud de mensajes de ánimo, a sus equipos, a sus entrenadores y entrenadoras… al club ¡MARNI, força! ¡Nos vemos pronto!
Y nos quedamos con la reflexión de Vicente: “La verdad es que, echando la vista atrás y después de llevar unos 10 años en el Club, estamos orgullosos de pertenecer a la gran familia que es el Club Balonmano Marni y de todo lo que han aportado a nuestros hijos en su formación como personas. Hay un gran equipo humano detrás, al que queremos dar las GRACIAS por todo el trabajo que hacéis de forma desinteresada para que todos podamos disfrutar de este gran deporte.”
A VOSOTROS… GRACIAS POR TANTO (y en especial, mis agradecimientos a estas tres familias por su colaboración en este reportaje. Y a Anna por ese precioso dibujo)
Por último, un anuncio para los más peques del club… En breve os llegará una propuesta sorpresa. ¡Hasta la semana que viene!